#36
Resituar la religión

Seguimos atrapados en circunstancias de excepcionalidad. El mundo confinado por la pandemia espera, sufre y se angustia porque pasamos los días atrapados en la telaraña que traman la enfermedad y la incertidumbre. Intuimos que el orden en el que hemos vivido se está reconfigurando, pensamos que dejaremos de vivir como lo habíamos hecho de una manera que ayer nos parecía perfectamente natural, pero no sabemos a ciencia cierta cómo será el mundo que nos encontraremos mañana cuándo empecemos a salir de casa ni cuál será la relación que restableceremos con los otros ni si podremos vivir la intimidad como hasta ahora habíamos hecho. Este paréntesis con forma de interrogante, que ha coincidido con una Semana Santa recluida, invita a repensar procesos de funcionamiento pero también encamina hacia la introspección. En tiempo de nuevas formas de espiritualidad, arraigadas a nuestra tradición o conectadas con otras que fueron lejanas, ensayamos una mirada hacia la secularización y hacia las religiones para saber cuál es su presencia es nuestra sociedad, cuál es y podría ser su función y cómo todavía son o quiere seguir siendo una invitación en busca de sentido.